COMENTARIO

En nuestro día a día, siempre ha existido una masa poblacional que disminuye a los otros porque: poseen diferentes rasgos que nosotros; tienen otras culturas, poseen una categoría social inferior o provienen de etnias consideradas no civilizadas. Escuchamos a menudo: cholo, negro, blanco; pero a caso nos ponemos a pensar en el daño que se ocasionan con estas palabras. La negación de un tipo de prejuicio hacia los demás no es cosa rara. Los estereotipos y prejuicios que poseemos, ya sea aprendidos o transmitidos, son utilizados en su mayoría de forma negativa; para demarcar el supuesto ‘amplio limite’ que existe entre un grupo y el otro.

Y en su mayoría, es cierto, los estereotipos tienen rasgos negativos pero no en su totalidad; también, y aunque se dude en creer, es útil para nuestras relaciones con los demás. ¿Qué es un estereotipo? Pues es un conjunto de creencias compartidas acerca de los atributos personales que poseen los miembros de un grupo. CREENCIAS COMPARTIDAS favorables o no, para la persona a observar y/o sociabilizar.

Ahora bien, estos estereotipos generan una consecuencia: los prejuicios; los cuales consisten en juzgar y reaccionar ante un individuo basándose en la categoría al que pertenece; en decir darle su valor como persona dependiendo de qué clase social provenga.

Los prejuicios no desaparecen, simplemente adaptan otras formas como: el apoyar la no discriminación, pero poseyendo sentimientos negativos hacia determinado grupo; el no manifestar sus sentimientos de no querer vincularse con ciertas personas, entre otros.

ESTEREOTIPOS Y PREJUICIO, un tema muy abundante e influyente para nuestra realización como personas; pues al tener un conocimiento adecuado y saberlo emplear podremos llevar una vida activa y productiva con los demás; los estereotipos y prejuicio siempre existirán, ¿Cómo combatirlos?; con una adecuada autoafirmación y sobre todo cambiar el sistema de relaciones entre grupos que predomina en el hoy.